Un
restaurante donde se complementan a la perfección el espacio, el arte, la deco,
la vajilla y, por supuesto, la comida. Morphen nació como un concepto que luego
de un año de existencia, se consolida con su cocina “de influencia”.
Su chef,
Enrique Oliver optó por una carta corta con impronta patagónica y productos muy
frescos trabajados en el día. Y entre las tentadoras opciones está la estrella:
la trucha grillada con salsa de hongos, vegetales blancos, puerros confitados,
nabos, coliflor, y un toque de aceite de sésamos, sumada una vinagreta de
lentejas turcas.
Si elegís
esta opción te recomiendo acompañarla con vinos ligeros y frescos como el
Albariño, Verdejo, Godello o Chardonnay, así vas a lograr potenciar los
sabores.