Si la aventura es el motor de tu vida, hacer el Camino del Inca es una experiencia que te va encantar. Se trata de una travesía de aproximadamente 43 kilómetros entre las deslumbrantes Cusco y Machu Picchu, en Perú, que pueden hacer desde senderistas expertos hasta principiantes.
A lo largo de este viaje, los visitantes se topan con imponentes ruinas incas, pobladores que mantienen sus tradiciones ancestrales, un paisaje de bosque, montaña y selva exuberantes, y muchas maravillas más.
Hay muchos caminos que conducen a Machu Picchu, pero ninguno como el Camino Inca. Armate de valor para una aventura inolvidable con la guía de Tangol.
Qué es el Camino del Inca
Hace más de 500 años, los incas desarrollaron una inmensa red de senderos a lo largo del Tahuantinsuyo (nombre que llevaba el gran Imperio). Este sistema de rutas, nombrado Qhapaq Ñan, abarcó los territorios de Perú, Argentina, Bolivia, Chile, Colombia y Ecuador.
En su vasta extensión, atraviesa deslumbrantes paisajes, con alta montaña, valles nevados, y selvas llenas de flora y fauna. El imperio incaico construyó la red del Qhapac Ñan —que en quechua significa “caminos del rey” o “caminos del poderoso”— con el objetivo de vincular comercial y culturalmente a pueblos de distintas regiones. Además, la intención era permitir una dinámica interactiva de valores sociales, tecnológicos e ideológicos.
Hoy en día, muchos de los senderos de este sistema siguen habilitados para los mismos fines de sus orígenes y otros más nuevos. Por ejemplo, además de ser una vía de transporte y permitir la conectividad entre pueblos, es utilizado por el turismo regional.
En este sentido, el Camino del Inca es considerado por los especialistas en turismo como la mejor ruta para llegar a pie a una de las 7 maravillas del mundo: el Santuario Histórico de Machu Picchu.
Además, este tramo fue catalogado el mejor de Sudamérica, y como una de las 5 mejores caminatas en el mundo. Cada año, más de 25.000 viajeros recorren sus 43 kilómetros a través de paisajes impresionantes.
Por su relevancia, el famoso trayecto conocido como Camino del Inca fue declarado como Patrimonio Mundial por la UNESCO, ya que es una ruta difícil de igualar en el planeta. A lo largo del recorrido se toma contacto con las tradiciones ancestrales de una de las civilizaciones más importantes de la historia sudamericana.
Cómo se hace el Camino del Inca
Para tomar el Camino del Inca es obligatorio contratar una agencia de turismo que cuente con el permiso del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (SERNANP), ya que, de esta manera, el Estado peruano garantiza seguridad y la mejor experiencia posible para los visitantes.
Existen varias maneras de realizar el Camino del Inca. Una de las variantes más populares es hacerlo en 3 noches y 4 días; o en 2 días y 1 noche. También se suele hacer en 5 días, combinando con algún otro sendero. Todo depende del nivel de dificultad y el estado físico de quien contrate el servicio. Pese a ser un trekking exigente, no resulta para nada complejo hacerlo si se tiene una mínima experiencia en senderismo.
En tanto, aunque todas las agencias de turismo autorizadas ofrecen excelentes servicios (guías profesionales, porteadores, chefs, primeros auxilios, etcétera), existen leves variantes respecto del tipo de pernocte (hotel o camping, por ejemplo) y la cantidad de participantes en el recorrido.
Temporadas: cuándo se recomienda hacer el Camino del Inca
Como en todo viaje, hay que conocer el clima de estación para prepararse ante cualquier evento meteorológico. En ese sentido, los viajeros que estén por realizar el Camino del Inca deben saber que de noviembre a marzo frecuentan las lluvias, mientras que de abril a octubre es más bien clima seco.
Aunque los grupos se organizan durante todo el año (excepto en febrero, cuando llueve mucho y los senderos están cerrados por mantenimiento), los mejores meses (más fríos y secos) son junio, julio y agosto.
Para evitar las multitudes, es mejor ir antes o después de la temporada de lluvias (de marzo a mayo) o de septiembre a noviembre. La temperatura mínima anual promedio varía entre 8 °C y 11.2 °C. Sin embargo, en junio, julio y agosto, la temperatura puede bajar por debajo de cero. Por otro lado, la temperatura máxima anual promedio varía de 20.4 °C a 26.6 °C.
No importa en qué mes estés planificando hacer la caminata: asegurá tener un equipo de lluvia que incluya una campera impermeable, pantalones, poncho y guantes impermeables. Muchas personas se olvidan de los guantes, pero el frío y la humedad hacen que caminar sea muy desagradable.
También se recomienda prepararse para las cuatro estaciones, dado que el trekking en los Andes involucra varios microclimas. Las capas son siempre esenciales ya que son fáciles de ajustar a diferentes cambios de temperatura. Preparate con una campera abrigada, ya que la noche será fría.
Con toda esta información podés organizar tu viaje y vivir una experiencia inolvidable en un sitio importante por su historia, cultura y geografía.