In the vast and silent immensity of the Patagonian steppe, al Metropolis-Regular;font-size:18px">, hides one of the oldest works of art on the continent: the Cueva de las Manos, located within the Metropolis-Regular; style="font-style: inherit; font-variant: inherit; font-weight: bold; font-stretch: inherit; font-size: inherit; line-height: inherit; font-family: inherit; font-optical-sizing: inherit; font-size-adjust: inherit; font-kerning: inherit; font-feature-settings: inherit; font-variation-settings: inherit; vertical-align: initial; box-sizing: border-box">majestuoso Cañadón del Río Pinturas.
These are caves that receive hundreds of silhouettes of hands painted in negative by members of the first communities that inhabited the region, more than 9.000 years ago the scenes of the hunt. guanacos and abstract figures, which to this day arouse questions and admiration, are of extraordinary archaeological and symbolic value. This is why the site was declared a World Heritage Site by UNESCO. inherit font-variant-alternates: inherit font-variant-emoji: inherit font-stretch: inherit font-size: 24-px-font; sizing: inherit font-kerning: inherit font-variation-settings: inherit margin: 0px 24px; But this place is not the only place to see rock paintings in this part of Argentine Patagonia. If you are in El Calafate, in the south of the province, the best way to observe this type of ancestral art is in bold; font-size: inherit; font-family: inherit; align: initial; box-sizing: border-box">Punta Walichu, home of the Caves of the Gualicho.
Punta Walichu: rock paintings in El Calafate
Si estás a El Calafate and not contás with the time necessary to arrive at Santa Cru, there is no alternative. nearest to observe cave paintings: Punta Walichu, also known as the style="font-style: inherit; font-variant: inherit; font-weight: bold; font-stretch: inherit; font-size: inherit; line-height: inherit; font-family: inherit; font-optical-sizing: inherit; font-size-adjust: inherit; font-kerning: inherit; font-feature-settings: inherit; font-variation-settings: inherit; vertical-align: initial; box-sizing: border-box">Cuevas de Gualicho.
Por la cercanía y relación cultural entre ambos lugares, la visita a Cuevas del Gualicho se completa con un recorrido por el centro de El Calafate. El city tour de Tangol está diseñado para conocer el centro, las pinturas rupestres y otros paisajes cercanos como el Paseo Costero, donde la experiencia se completa con avistajes de fauna local.
Dónde queda la Cueva de las Manos y cómo llegar
Para quienes se preguntan exactamente dónde queda la Cueva de las Manos, la respuesta es precisa y poética a la vez: en el medio de la nada, pero justo donde todo comenzó. El sitio se encuentra en el noroeste de Santa Cruz, dentro del Parque Provincial Cueva de las Manos, a unos 120 kilómetros al sur de la localidad de Perito Moreno. Está abierta al público con horarios establecidos, e incluye un circuito guiado que permite contemplar las pinturas de cerca, sin dañarlas.
La Cueva de las Manos y el Cañadón del Río Pinturas constituyen una joya silenciosa, escondida en la geografía austral, pero fundamental para comprender nuestra historia como especie. El impacto de estar frente a esas huellas humanas milenarias es difícil de describir. Es una experiencia que trasciende lo turístico: nos conecta con los orígenes del lenguaje visual, con la relación entre el ser humano y la tierra, y con la necesidad de dejar una marca.
La mejor forma de llegar es con una excursión de trekking a Cueva de Las Manos desde Los Antiguos. De esta forma, no solo tenés que despreocuparte por los traslados, sino que vas a conocer el sitio arqueológico con un guia experto en el territorio y su historia. Además, la ruta de trekking te lleva a conocer el Cañadon Caracoles y las “Tierras de Colores”.
Un paisaje que habla: el Cañadón del Río Pinturas
El acceso a la Cueva de las Manos en Santa Cruz es también un viaje por uno de los paisajes más impresionantes de la Patagonia: el Cañadón del Río Pinturas, un desfiladero profundo excavado por el río a lo largo de milenios. Sus paredones rojizos están cubiertos por la erosión y salpicados de vegetación nativa.
La cueva se encuentra en el corazón del cañadón. Ahí conserva intactos los rastros de los primeros pueblos cazadores-recolectores. Las manos en negativo aparecen superpuestas en una especie de conmovedor ritual colectivo. Las escenas de caza, realizadas con pigmentos naturales y técnicas sofisticadas para la época, muestran guanacos flechados, figuras humanas y formas geométricas. No se trata solo de arte rupestre: es el eco de una cosmovisión.
Aunque se encuentre en un lugar bastante remoto, es posible acceder con organización previa, y resulta mucho más cercano si se parte desde localidades como Los Antiguos.
Cómo llegar desde Los Antiguos a la Cueva de las Manos
Una de las formas más cómodas y recomendables de visitar el sitio es desde la localidad de Los Antiguos, ubicada a orillas del Lago Buenos Aires, sobre la Ruta 43. A partir de ahí se accede por caminos escénicos y de ripio al paraje Bajo Caracoles, y luego al acceso del cañadón. La distancia entre Los Antiguos y la Cueva de las Manos es de unos 160 kilómetros y puede realizarse en excursiones organizadas de día completo.
Con Tangol podés adentrarte en una aventura así con un paquete que incluye traslados, guías especializados, y actividades complementarias.Algunas opciones permiten combinar la visita con recorridos por estancias, navegación por el lago, o incluso tramos de senderismo o avistaje de fauna local.
Consultando con antelación, también se pueden coordinar paquetes saliendo desde El Calafate, aunque la distancia de Calafate a la Cueva de las Manos supera los 600 kilómetros.