La Plaza Independencia es el punto de encuentro entre el pasado colonial de Montevideo y su presente vibrante. Su ubicación marca la frontera entre la Ciudad Vieja, con sus callejones empedrados y edificios históricos, y el centro de la ciudad, antes conocido como Ciudad Nueva, con su pulso moderno.
El diseño original de la Plaza Independencia de Montevideo fue concebido en 1837 por el arquitecto Carlo Zucchi, en el contexto de la expansión de la ciudad. Su visión se inspiró en maestros como Percier y Fontaine, y se puede ver una clara influencia de la parisina Rue de Rivoli en su trazado. Aunque el proyecto original sufrió modificaciones en 1860 a cargo de Bernardo Poncini, la esencia de un espacio amplio y monumental se mantuvo.
La accesibilidad urbana de esta zona es excelente. La plaza es un nudo de transporte, con múltiples líneas de ómnibus que conectan con toda la ciudad. Además, al estar en el límite de la Ciudad Vieja, es el punto de partida ideal para recorrer a pie gran parte de los atractivos turísticos, gracias a calles bien conservadas y en su mayoría planas. La mejor forma de aventurarte a este recorrido es con un city tour en Montevideo.
Estatua de Artigas en la Plaza Independencia de Montevideo
En el centro exacto de la Plaza Independencia se alza majestuoso el Monumento a Artigas, una impresionante estatua ecuestre de José Gervasio Artigas, obra del escultor italiano Angelo Zanelli. Esta imponente figura rinde homenaje al prócer de la independencia uruguaya, una figura clave en la historia del Río de la Plata. La base del monumento está adornada con un bajorrelieve en bronce que narra escenas del Éxodo del Pueblo Oriental, un momento trascendental en la lucha por la libertad.
Bajo la estatua se encuentra el Mausoleo de Artigas, donde descansaron los restos del héroe. En 2011 fueron trasladados temporalmente a los Cuarteles de Blandengues para permitir la restauración del mausoleo, y regresaron a su morada definitiva en 2012. Este mausoleo es un testimonio silencioso de la historia de la Plaza Independencia de Montevideo y del legado de Artigas
Un detalle interesante sobre la plaza es el número de palmeras que la adornan: 33. Este número no es casualidad; conmemora a los Treinta y Tres Orientales, patriotas que lideraron la gesta libertadora y que tienen un lugar especial en el imaginario colectivo uruguayo.
Qué hacer y qué ver cerca de la Plaza Independencia
La Plaza Independencia es un espacio vital para la vida de la ciudad. A menudo, es escenario de exhibiciones artísticas, conciertos al aire libre y eventos culturales. Además, está rodeada de edificios emblemáticos que narran la evolución de Montevideo. Cada uno de ellos tiene su propia historia y contribuye a la riqueza visual del entorno.
Para aprovechar al máximo tu recorrido, lo mejor es dedicar al menos un par de horas. El mejor punto de partida es admirar el Monumento a Artigas, para continuar en el mausoleo. Luego, rodear la plaza para apreciar cada uno de los edificios emblemáticos que la flanquean. No dudes en adentrarte en la Ciudad Vieja a través de la Puerta de la Ciudadela, y si el tiempo lo permite, visitar el Museo del Palacio Estévez.
La plaza es un lugar seguro para pasear durante el día. Por las noches, la iluminación resalta su belleza, aunque siempre es prudente estar atento. Veamos qué lugares y atractivos cercanos son imperdibles.
La Puerta de la Ciudadela y el Edificio Ciudadela
Hacia el oeste de la plaza, se encuentra la imponente Puerta de la Ciudadela, el último vestigio de la muralla que protegía la Montevideo colonial. Cruzar esta puerta es adentrarse en la Ciudad Vieja y marcar el inicio de la Peatonal Sarandí, un paseo encantador lleno de tiendas, cafés y galerías de arte.
Justo al cruzar la calle aparece la gran fachada de vidrio del Edificio Ciudadela, una obra moderna del arquitecto Raúl Sichero que contrasta con los edificios históricos circundantes. Es un ejemplo de cómo Montevideo ha sabido integrar lo contemporáneo sin renunciar a su patrimonio.
El Poder Ejecutivo: Torre Ejecutiva y Palacio Estévez
En la acera sur de la plaza se alzan dos edificios que representan el poder político de Uruguay. La Torre Ejecutiva es la sede actual del Poder Ejecutivo, una moderna construcción que alberga las oficinas presidenciales.
Justo al lado se encuentra el Palacio Estévez, que fue la sede del Poder Ejecutivo hasta hace unas décadas. Aunque ya no es la sede principal, el Palacio Estévez aún se utiliza para importantes actos protocolares, como la tradicional transferencia de la banda presidencial. Además, parte de este palacio alberga un museo que bien vale la pena visitar para profundizar en la historia política del país.
El Palacio Salvo
En la acera este, en la esquina con la Avenida 18 de Julio, se alza el imponente Palacio Salvo. Este edificio de silueta gótica fue en el momento de su construcción el más alto de América del Sur. Su presencia es inconfundible y su historia es fascinante. Es un punto de referencia imperdible para pasear por Montevideo, y su estilo es un recordatorio de la audacia arquitectónica de principios del siglo XX.