Esta cervecería bar tiene formato de una cálida y espaciosa casa con interiores y mobiliario de madera, vista a la sala de elaboración de cervezas y ventanales a la isla Huemul (a la altura de Playa Bonita).
Tiene capacidad para varias personas en el interior y en la terraza. Esta marca chilena también tiene una propuesta de comidas: el menú tiene platos alemanes, ahumados patagónicos y clásicos argentinos.
También hay tours y degustaciones individuales o grupales, y se puede ver en vivo el cocimiento (en general se hace tres veces por semana). En el ingreso llama la atención un sector de lockers llamado stammgäste, “clientes frecuentes” en alemán: allí los habitués pueden dejar sus vasos para volver a usar en la próxima visita.